La Gestión Integral de Fauna aborda los proyectos desde una concepción global que se preocupa tanto por la biología de las especies como por su estado sanitario y la calidad del entorno que habitan.
El hecho diferencial de nuestro trabajo reside en la relevancia del papel de la sanidad como un pilar básico para una correcta gestión de la fauna y su interacción con el hombre (concepto “One Health”; una estrategia global para prevenir y gestionar riesgos sanitarios en la interfase animal-humano).
En la búsqueda de la coherencia profesional, tenemos como una premisa ineludible la minimización de nuestra huella ecológica. Para ello todos los proyectos se abordan intentando reducir al máximo el impacto que puedan generar sobre el entorno. Este compromiso se hace extensible al trabajo de oficina apostando por un consumo responsable (reducir, reutilizar y reciclar).